Buque de Papel no va a Rock al Parque 2023

Por: Buque de Papel. Info y fotos: bandas e Idartes

Cambios absurdos como en las fecha de Rock al Parque o meterle ideología de género y dar línea para tener solo bandas roqueras por mujeres, sin detenerse a preguntar si hay tantas bandas de calidad conformadas por solo mujeres y que completaran el cartel. Y antes de que nos caiga el comentario en contra los extremismos feminazistas, ¡claro que las hay!, pero en otros países y donde la gestión y gerencia brillaron por su ausencia. 

Doro, Lita Ford, Halestrom, The Pretty Reckless, Burning Witches, Joan Jett, entre muchas otras, quienes con seguridad y con tiempo aceptarían honradas asistir al festival porque tiene nombre y 27 años pesan. Pero no puede seguir viviendo solo del nombre. Eso hay que gestionarlo. Viejos nos enteramos que existe La Renga,el Indio Solari, La Máquina de Matar Pájaros, o Ricardo Iorio, antes que se muriera hace una semana. ¿Y Kraken, con Roxana Restrepo, que está reverdecido? En otros países latinoamericanos también hay bandas que llevan años queriendo venir ¡y nadie los invita! 

El festival viene de capa caída desde hace años por esos cambios y agotamiento de quienes por los movimientos políticos regresan, se van, vuelven, para hacer la curaduría, como los eternos y excelentes Héctor Mora JR o Chucho Merchán. Y un IDARTES, que se perdió dentro de los papales de la burocracia, con menos recursos (no se sabe) y recibe las órdenes del alcalde o alcadesa de turno, cuando no tiembla ante nefastos mandatarios que querían acabarlo.

Ahora, el cartel de este año denota la improvisación al extremo. Repetir bandas del año pasado y de otros más, confirma que nadie le está parando bolas al festival o que no hubo gestión (¿Aterciopelados otra vez?). O lo que es peor, las dos. Tampoco se puede justificar que ante la diversidad, metan ahora a artistas pop, tropipop y otros géneros que son muy respetables, pero no son rock. Y sin purismos que no viene al caso.

Ni mencionemos la improvisación con los medios de comunicación que sí asistimos los tres días y a quienes, cada año de esta alcaldía que menos mal se acaba, nos trataron mal y en forma discriminatoria. Una sala de prensa que pierde espacio, cero logística de apoyo para conexiones y menos internet; nunca más de dos acreditaciones y a los comerciales, todas las entradas sin siquiera que asistan. Jamás vemos a Caracol o a RCN el sábado del metal y menos preguntando en las ruedas de prensa de las bandas distritales que se ganaron el derecho a participar. 

Por eso Buque de Papel decidió abstenerse este año de cubrir el festival. Luego de analizarlo con el equipo y los tripulantes llegamos a esta decisión, como una forma de protesta ante una alcaldía indolente y unos funcionarios que perdieron el norte y estropean la esencia de Rock al Parque: dar el espacio al rock, así como la música ejecutada con calidad y ganada a pulso. 

En las últimas versiones empezaron las palancas para que otros grupos, respetables todos en su forma de expresión, subiesen a tarima, solo porque son cercanos a los directivos o funcionarios distritales. Grupos musicales que no son roqueros en sus múltiples vertientes, los hacen parecer como tal, o meten a dos de las bandas de renombre que logran hacer venir, a la misma hora en escenarios distintos. Un tema que no es nada menor y que con el paso de los años y los festivales, ese acerbo, esa mecánica y experiencia que se gana, que se construye, se perdió.

Por eso vemos que otros festivales totalmente comerciales y donde hay que pagar van ganando terreno y es lícito: El Estéreo Picnic, Monserrate, y otros más roqueros, que entendieron que esto es una industria y están actuando en consecuencia, mientras el elefante estatal sigue engordando y perdiendo velocidad. Así que el objetivo del festival, democratizar el acceso gratuito para que quienes en la vida van a tener recursos para pagar una banda internacional o viajar a otro país, disfruten y vean muchas bandas de renombre y otras que comienzan, también se perdió.

Viene cambio de aire, de alcaldía, de directivos de IDARTES, a la espera que llegue gente que piense y sienta y recupere esa esencia del rock y de los festivales al parque. Una vez veamos que eso se encamina, desde la borda del Buque decidiremos atracar de nuevo en esas costas. Tenemos con qué decir y opinar: 19 años ininterrumpidos cubriendo el festival nos dan autoridad para escribir estas líneas y tomar decisiones. Y el alma roquera seguirá viajando a bordo del Buque y su emisora Radio Pirata. Nos vemos.

Algunas bandas, y sin otras repetidas, para este año: 

In Flames (Suecia)

Overkill (EE.UU.), que vuelve. Estuvo en 2011.

Chemicide (Costa Rica)

Jenny Woo (Canadá)

Eshtadur (Colombia ¡ESTO SÍ ES ROCK!)

Los Calzones (Argentina)

Non Palidece (Argentina)

Marilina Bertoldi (Argentina ¿rock?)

Los Punsetes (España)

No Procede (España)

Cabra (Puerto Rico ¿rock?)

Sonido Gallo Negro (México)

Salón Victoria (México)

Javiera Mena (Chile ¿esto es rock?)

Junior Zamora

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