Vení chupagaló
Ahí donde está la herida brota la esperanza. Esta es la acción simbólica que se presenta como resultado del Laboratorio en Cuerpo y Territorio: Traduciendo la Herida y la Esperanza en Danza y Movimiento, ganador del programa Estímulos de la Secretaria de Cultura de Cali, presentado por el colectivo Somos Cuerpos, Somos Territorios.
Por: Leonardo Alba Mejía, Especial para Buque de Papel, Fotos: Laboratorio en Cuerpo y Territorio
Esta acción integra varios momentos performativos, danzados, cantados y poéticos, que recoge las ideas y colaboraciones que fueron ocurriendo en el desarrollo del laboratorio.
“Vení chupagaló” fue una expresión compartida por las y los jóvenes del laboratorio que es utilizada en el barrio para llamar la atención e invitar a alguien para contar una noticia. La novedad es que esta acción tendrá lugar este sábado 6 de noviembre, a las diez de la mañana en el Parque La Arboleda del Barrio Potrero Grande del Distrito de Aguablanca.
El colectivo Somos Cuerpos, Somos Territorios está integrado por Irene García, Valentino Alba, Maria Urcuqui, Luisa Fernanda Sanabria y Leonardo Alba Mejía.
Este laboratorio propuso ocho talleres con ejercicios alrededor de la memoria histórica, las narrativas del cuerpo, las heridas y esperanzas y la producción de imágenes alrededor del cuerpo y el territorio. La población juvenil que hace parte de la propuesta pertenece a los programas de formación desde el enfoque restaurativo, que viene desarrollando la Fundación Paz y Bien, en casas ubicadas en los barrios La Pradera, Potrero Grande, El Retiro y Quintas del Sol del Distrito de Aguablanca de la ciudad de Cali.
Estos 16 jóvenes vienen indagando en temas que hablan de heridas y esperanzas personales y sociales asociadas a la experiencia de vivir en Cali y en el Distrito. Desde aquí se propone, con las herramientas conceptuales que presentan cuatro talleristas, exploraciones desde la danza contemporánea, la imagen, la música, el tango danza y la poesía para traducir lo que se vive como herida y esperanza en acciones simbólicas. Junto a este experimento también se viene elaborando un manifiesto audiovisual que recoge las voces de estos jóvenes para registrar el proceso.
Unión de artistas
En la acción simbólica colaboran otros artistas que se unen en el proceso co-creador que propone el Laboratorio en Cuerpo y Territorio, bajo el lema de traducir heridas y esperanzas en símbolos, con improvisaciones danzadas, poemas, músicas, canciones, propuestas audiovisuales caseras que se integran al resultado final.
Estos cruces de lenguajes proponen construir un mosaico poético que integra a las comunidades barriales con las que trabaja la Fundación Paz y Bien para honrar la vida y seguir transformando heridas en esperanzas.
Esta organización surgió hace 33 años, desde un proceso de diálogos transformadores, alentado por liderazgos de mujeres que sueñan mejores condiciones de vida para ellas, sus hijas e hijos y la población juvenil del Distrito.
La Fundación Piazzolla Escuela de Tango aportó sus instalaciones de danza para desarrollar las jornadas formativas que orientó la bailarina y coreógrafa Irene García. El colectivo Juventango se integra al Laboratorio y en el ejercicio co-creador con un manifiesto danzado que celebra lo diferente.
Este colectivo es parte de la apuesta de la Fundación Piazzola por ofrecer a la población juvenil caleña desde hace 25 años la opción de vivir una pedagogía liberadora en una mirada integral del mundo del tango y su danza. El programa Estímulos de la Secretaria de Cultura de Cali hace el acompañamiento técnico del laboratorio y aporta los recursos económicos para el desarrollo de este primer resultado.
Se suman, además, el artista Miguel Burgos y el colectivo Manglart, a través de una bandera de Colombia de 30 metros de largo; el cantautor montemariano, Manuel de La Rosa escribió una canción como ofrenda final para la esperanza, y el músico Hernando José Cobo aportó elementos sonoros que contribuyen al diseño de este rito colectivo por la vida. El poeta Laureano Alba escribió un poema que habla del espíritu actual que vive la ciudad; el artista Real Black egresado del programa Francisco Esperanza de la Fundación Paz y Bien estará contando su historia con música y mostrando el trabajo que realiza con otros jóvenes a través de la salsa Choke.
El cruce de experiencias que produce el laboratorio deja como lección aprendida que este trabajo debe ser un ejercicio permanente en la ciudad. Otra lección es que cualquier idea de restauración de la armonía social en la ciudad debe incluir múltiples formas simbólicas de expresar lo que están viviendo las comunidades de jóvenes a través de ejercicios co-creadores con artistas de la ciudad.
